Mucha resistencia al cambio sucede por los sesgos en el trabajo. Estos son algunos de ellos...
No es ningún secreto que el concepto de “cultura corporativa” ha ganado mucha importancia en la década pasada. Y con ese concepto, otros como seguridad psicológica, empatía, conversaciones difíciles y fracaso.
Los ojos del mundo corporativo están donde deben estar: el bienestar de los seres humanos que lo conforman.
Irónicamente una encuesta de 2018 reveló que: mientras el 92% de los CEOs entrevistados consideraban que sus empresas eran empáticas, sólo el 50% de sus empleados pensaban que eso era verdad.
Y es que en muchas ocasiones, a pesar de los esfuerzos por mejorar la cultura organizacional, existen diversos obstáculos en estos procesos. Algo que hemos aprendido de primera mano con nuestro Failure Program, nuestro programa de cursos, workshops y eventos para renovar culturas organizaciones.
Muchas de esas resistencias al cambio están estrechamente relacionadas con los sesgos. En esta ocasión, conoceremos algunos sesgos que suelen interferir con estos cambios de mentalidad. Pero antes… ¿Qué son los sesgos exactamente?
Aunque puedan tener una connotación negativa, los sesgos son atajos mentales. Nos permiten tomar decisiones rápidas y guiarnos a acciones más efectivas en situaciones específicas.
Normalmente, el 47% de las actividades que realizamos, corren en piloto automático. Y eso está bien. No podemos decidir todos los días la forma de preparar nuestro café o la técnica para cepillarnos los dientes. Sería cansado y probablemente hasta peligroso. Es por esto que los sesgos cognitivos existen.
No tenemos por qué deshacernos de ellos, al contrario, es importante racionalizarlos e identificarlos. Esto podría ayudar a mejorar nuestras estructuras mentales, ser más críticos y objetivos.
Ahora que sabemos que los sesgos no siempre son malos, podemos hablar de algunos que se interponen al salir de nuestra zona de confort. En nuestra experiencia, solemos encontrarlos al momento de proponer nuestros programas de gestión del fracaso, seguridad psicológica y conversaciones difíciles a nuestros clientes:
1.Sesgo de aversión a la pérdida: Este sesgo se da como una reacción negativa ante el cambio. Cuando se presenta, las personas suelen darle demasiado valor al potencial de las posibles pérdidas, en vez de enfocarse en las ganancias
Comúnmente, cuando se propone un cambio de cultura organizacional importante, se suelen apuntar y exagerar posibles amenazas al “orden” dentro de la organización, incluso un riesgo en procesos establecidos que, generalmente, son obsoletos y dañinos para la cultura.
2.Sesgo de confirmación: Sucede cuando tendemos a escuchar y dar importancia a información que confirma o favorece nuestras creencias y opiniones.
Esto lo vemos, por ejemplo, cuando existen propuestas de nuevos procesos o alternativas respecto al enfoque de filosofía. Algunas personas con este sesgo, buscarán datos para refutar estas nuevas propuestas o apuntarán buenas prácticas existentes como suficientes para no innovar y buscar mejoras.
3.Efecto del falso consenso: Dentro de este efecto, creemos que hay más gente que está de acuerdo con nosotros de lo que realmente es el caso.
Esto puede suceder cuando alguien expone en alguna reunión su punto de vista sobre lo innecesario que es renovar su cultura organizacional. Al no existir seguridad psicológica en el ambiente, existe una baja participación o temor a refutar. Por lo tanto, se da por terminado el asunto y se asume que todxs coinciden.
4.Sesgo de afinidad: Se da cuando tenemos una mayor afinidad a lo conocido. Personas, rostros, situaciones o ambientes que sean lo más similares a los nuestros.
Estos sesgos nos hablan de zonas de confort. Situaciones que nos hacen sentir seguros y “libre de peligros” pues supuestamente estamos rodeados de cosas afines y seguras para nosotros.
Cuando se presenta un cambio, este sesgo nos hace huir de esas nuevas oportunidades o nuevos caminos a los que no estamos acostumbrados.
Como vemos, muchos de estos sesgos dan oportunidad a malos entendidos, fallos en la comunicación y exceso de confianza al tomar decisiones. Esto nos hace resistirnos al cambio, mejoras, nuevos procesos y nos hace más propensos a cometer errores.
Aunque los sesgos generalmente suceden en automático y son naturales, con nuestro Failure Program diseñamos una serie de cursos y workshops para identificarlos y cuestionarlos. Con esto buscamos mejorar la cultura corporativa de nuestros clientes y ayudarlos a tomar mejores decisiones. Decisiones libres de prejuicios y más adecuadas a la realidad.
Agenda una llamada con nosotros para conocer cómo podemos ayudarte a hacer lo mismo.
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Transformemos nuestra percepción del fracaso y utilicémoslo como catalizador del crecimiento.
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